Solo Amigos Capitulo 8

Capítulo 8 – Que dia de mierda... 

-Me tengo que ir -me dio un beso en mi frente y salió, ni siquiera lo vi a la cara y yo como estúpida que soy solo me quede ahí parada hasta que arranco y desapareció por la carretera.

Lo que siguió de la noche me la pase acostada mirando el techo con mi iPod encendido de modo que estuviera como fondo. Solo me quede ahí procesando y tratando de entender de mi agresividad y enojo cuando estaba Tanya. Nada. Era absurdo, yo realmente no me entendía ni a mí misma, mi cabeza me estaba matando así que me tome una aspirina y me recosté, después de tratar casi una hora y media cai dormida


(.)

Apenas me levante recordé todo y me puse triste. Los domingos siempre era día de flojear pero aun así  siempre tenía algo que hacer, lamentablemente hoy sería un domingo diferente

Era raro estar ahí sentada sin hacer… nada. Suspire y me levante, aun tría la ropa de ayer no me quise cambiar, solo me hice una coleta alta y listo.

-Mierda, esto apesta –susurre bajando las escaleras sin hacer ruido par ano despertar a Charlie

Entre a la cocina di un vistazo por la ventana, sé que era estúpido, pero tenía unas ansias terribles de querer ver a Edward, volví a suspirar, siempre los domingos él llegaba temprano almorzábamos y bueno, ya saben, pero más que nada nos poníamos como unos criollos a ver películas y jugar juegos de mesas o a cantar con mis bocinas, si, éramos unos niños, en mi interior mientras cocinaba, pensaba y tenía la idea que el vendría y nos pondríamos en la sala a ver la Tv con Charlie, pero también sabía que hoy no vendría, había sido demasiado cruel con él, rápidamente cada palabra regreso a mi mente

-¡Bien, pues vete con tu maldita zorra!  ¡Yo quiero a Jacob y no me importa que pienses de mí, si no me vuelves a hablar, ok, lárgate, Jake es más importante que tú, como para perderlo por tu culpa! 
–Edward no dijo nada se quedó callado como si estuviera en shock

-Más importante  -repitió en un susurro

Sacudí mi cabeza para alejar todos esos pensamiento y prendí la estufa para hacer de almorzar para mi y Charlie Es lo mejor para los dos pensé cuantas veces lo necesitaba. Cuando termine desayune sola ya que Charlie no bajo, así que le deje su comida en la misita con un vaso de jugo y subi al cuarto.

Me acosté en la cama y sin evitarlo empecé a llorar, hoy no entraría Edward por la ventana o saldría por ella, hoy no sería así.

Sentí unos pasos subir por las escaleras así que rápidamente me limpie la cara

-Bella –llamo mi padre del otro lado de la puerta

-Voy – me levante y me mire en el espejo, mis ojos estaban hinchados y mi nariz roja maldije pero aun así abrí la puerta. Charlie me miro ceñudo, pero se sintió incómodo y miro a otro lado-

-gracias por el almuerzo, mmm iré a trabajar y regreso en la tarde, yo te hablo cuando venga para aca –hablo rápidamente, luego me miro- ¿todo está bien? –asentí mirando el piso

-Sí, solo, bueno, me siento algo mal –mentí- creo que tengo un resfriado, no aguanto la cabeza –lo último no era tanto mentira así que fue creíble, creo

-Bueno en mi cuarto tengo aspirina –asentí de nuevo- bueno me voy –sin más bajo las escaleras

-¡Nos vemos! –grite y luego se oyó la puerta cerrarse, me quede parada hasta que me canse y volví a la cama aun distendida, me acobije y cerré los ojos, mi cara estaba empapada del llanto. Me sentía mal, tenía nauseas, no tenía hambre, mi cabeza me estaba matando y tenía muchas ganas de gritar, de nuevo empecé a llorar, hasta que me dormí.

-¡Bella! -grito Edward subiendo las escaleras de la casita del árbol

-¿Ya los encontraste? –le pregunte

-Si aquí están los crayolas, Alice me los había escondido en el cuarto de Emmett y casi le pego a el  -se enojó y me enseño el morralito donde traía los colores

-Sí, creo que se estaba desquitando de que no me dejaras jugar Barbies con ella –se sentó en el suelo agarrando sus crayolas y su hoja yo me senté a lado de él y empecé a pintar

-¿Que dibujas? –le pregunte mientras comía mi paleta y seguía haciendo mi dibujo

-Estoy haciendo nuestra casa cuando seamos grandes -deje de dibujar y mire el suyo- ¿cómo la quieres? –pregunto enseñándome la hoja

-Muy grande –sonreí  y agarre el verde haciendo pasto- con un patio grande para jugar y columpios

-Pero mi papa me dijo que cuando eres grande no juegas –se quejó Edward

-Pero yo no voy a crese Edward

-¿Entonces cómo te vas a casar conmigo Bella? –su carita se puso triste

-Ahí tontito porque tú tampoco vas a crecer

-Yo si quiero crecer –me puse triste- pero para vivir contigo –sonrei de nuevo

-Bueno, crecemos y nos casamos, pero tienes que prometerme algo

-¿qué cosa?

-me tienes que comprar una casa con esta –tome el dibujo- con un patio grandote y prométeme que siempre  jugaras conmigo

-Trato echo –nos dimos la manos riendo-- ¿entonces… nos casamos? –sonrió

-Ahorita no Eddie –lo empuje- cuando seamos grandes

-Bueno cuando seamos grandes –suspiro dramáticamente y yo rodé mis ojos-  

-Mientras, sigamos pintando –tome otra hoja

-Ok –asintió sonriendo y seguimos pintando

Los ruidos de mi celular sonar me despertaron, rápidamente me levante algo paranoica por el sueño o mejor dicho recuerdo, me sonroje sin razón, Solo fue un sueño, no significaba nada aunque claro fue algo real, yo tenía como unos 7 o 8 años, el movimiento hiso que me mareara, pero lo ignore y tome el celular aun sonrojada

-Bueno –

-Lo siento no ire a cenar Bella –dijo Charlie, se cayó un momento- ¿te sientes mejor? si quieres, mejor regreso a casa y te llevo con Carlisle

-No –grite algo fuerte- es decir, no es necesario papa, me siento mejor, me imagino que iras con Sue

-Si –susurro tímido- ¿segura que te sientes mejor?

-Sí ya me siento mejor

-Como quiera le hablare a Carlisle, para que te vaya a checar o mejor Edw…

-No es necesario, yo le hablo –susurre

-De acuerdo, entonces nos vemos al rato

-Estoy bien papa, de echo –mire el reloj  eran las 8 pm- me voy a dormir ya –menti- tu quédate con Sue

-bueno

-Mándale saludos de mi parte

-Lo hare

-Adiós –y colgué.

Me levante y fui al baño, me eche agua en la cara y tome una toalla, cuando me seque me mire en el espejo, mi ojos estaban hinchados y rojos de tanto llorar, mi nariz estaba moqueando y roja y mi cara no demostraba ninguna emoción que no fuera de dolor. Debo admitir que me dio algo de miedo verme así, no es como si el mundo se fuera a acabar, solo era Edward, mi insignificante mejor amigo del alma.
Ya que estaba en el baño tome otra toalla y me desnude, un baño no me caería mal. Trate de olvidar porque estaba así pero era inútil, de solo volver a pensar en él, mi estómago se encogía y se me iba el aliento. Deje que cada gota del agua se confundiera con mis lágrimas y me deje llevar de nuevo

Jamás me pele así con Edward, no era solo que el no vino hoy a casa, no era solo eso, ni que no me hablo hoy, es que jamás en mi vida le grite así a nadie, mucho menos a él, él era.. Casi como mi todo, no en exceso pero si parecido, como mi sustento, que puedo decir es mi amigo. Me es difícil de entender por qué actué así, es como si en verdad hubiera estado celosa y eso me da escalofríos. Tengo miedo de que el realmente se tome en serio cada palabra y jamás me perdone ¿Qué tal si no vuelve? ¿Y si ya no quiere verme? Que estúpida y mierda que soy, realmente preferiría a Jacob?

 Cuando termine salí solo en toalla y mire mi celular, tenía 6 mensajes, uno de Jacob y los otros cinco de Alice

Domingo 15:17 pm;  Bella, anoche Edward llego y andaba muy raro ¿sabes que le pasa? (Alice Hale. C)

Domingo 15: 21 pm; No me has llamado Bella, ¿está todo bien? ¿Por qué Edward está aquí, siempre está contigo, no? (Alice Hale. C)

Domingo 15:25 pm; Por favor contesta Bella, Edward anda muy extraño, no ha salido de su cuarto ¡Llámame! (Alice Hale. C)

Domingo 18: 30 pm; ¿¡Bella, ya sabes que Edward y Tanya son novios!? (Alice Hale. C)

Domingos 18:37 pm;  ¡Bella, necesito hablar contigo es urgente! (Alice Hale. C)

Suspire y presione para ver el mensaje de Jacob

Domingo 20: 40 Bella, Charlie me dijo que estas enferma, ¿estás bien? ¿Necesitas algo? (Jacob_Black)

Presione las teclas y le conteste a Jacob primero, ya vería a Alice mañana

Estoy bien, solo me dolía la cabeza, pero ya estoy mejor, no necesito nada, ¡gracias!  (Bella M. Swan)

No tardó mucho en que me contestara

Bueno pero si necesitas algo solo avísame y estaré ahí, ¿de acuerdo? (Jacob_Black)

Estoy bien Jake, enserio (Bella M. Swan)

Ok, te creo, pero mañana te daré una vuelta, descansa (Jacob_Black)

Cerré el celular feliz y me puse mi pijama, baje a cenar algo, debo admitir que tenía mucha hambre, cuando termine, subí y me recosté en la cama. Aun que era estúpido, el simple mensaje de Jacob me hizo sentir un poco mejor, solo un poco, pero luego recordé el mensaje de Alice. Edward y Tanya ya son novios, era normal no, eso ya lo sabía, no es como si fuera del otro mundo, cierto, el gran Edward enamorado y de novio con Tanya, después de 17 años soltero, si exacto, Edward nunca tuvo novia, solo una en secundaria, no pasaron del mes, pero las demas solo eran sus chicas, eso era todo, pero al parecer una chica lo había vuelto de cabeza. Pero eso que me importa a mí, bueno si es mi amigo, tiene que importarme, debería estar feliz, por fin mi amigo enganchado


Pero no estoy feliz y no me agrada nada Tanya.

Destino - Capitulo 1

Tears stream down on your face

When you lose something you connot replace

Tears stream down on your face. And I...

I promes you i wll learn from the mistakes

Lights will guide you home

and ingnite your bones

and i wll try to fix you

(Y las lágrimas vienen bajan por tu rostro

Cuando pierdes algo que no puedes reemplazar

y las lágrimas vienen bajando por tu rostro. Y yo...

Prometo que yo aprenderé de mis errores

las luces te guiaran a casa

y alumbraran tus huesos

y yo tratare... arreglarte)

Hoy era el día que temía, era cuando recordaba del porque mi vida era un asco, estaba despierto pero con mis ojos aun cerrado así que me deje llevar empecé a recordar  algo que viví como un Flashback

Era de noche y estaba en el patio de mi casa recostado en el pasto mirando el cielo y cuando volteaba a mi lado estaba Bella recostada en mi hombro con sus manos en mi pecho y sonriendo, mirando al igual que yo el cielo

-¡Vez esas de ahí! -le señale una estrella, ella asintió- Bueno esa se llama estrella -Bella rodo los ojos- espere aun no termino, esa se llama estrella y la de al lado un poco más grande se llama Oscar -Bella me miro ceñuda- veras... cuando yo era pequeño mi abuelo me conto de un hombre llamado Oscar que todos los días iba al lago y mirando a las estrellas contaba todas su sueños, sus penas y todos sus anhelos, así que el fue a lago, era un día común como siempre el mientras hablaba a las estrellas miro que de una de ellas caía una lagrima, el sin creer siguió viendo hasta que la gota cayo al lago, solo fue una gotita asi que no presto atención alguna, pero en eso escucho que alguien gritaba que no podía nadar y sin pensarlo dos veces se tiro al lago hasta que la vio, era una mujer hermosa, ojos azules y pelo rubio,  demasiado blanca y su piel brillaba, la mujer se paró y lo miro murmurando que el era perfecto, el sin comprender pregunto si se conocían, ella contesto que no, que ella era un estrella y que lo veía desde el cielo y que cada vez que el venía a contar su vida ella venía a bailar con sus hermanas, el aun sorprendido le pregunto ¿y por qué has bajado? ella sonriendo le contesto que se había enamorado de el, que solo venía a bailar para escuchar sus pensamientos, que quería curar cada herida y hacerlo feliz, que habían crecieron juntos pero separados, en la miro asombrado y ella le pregunto, ¿Quedaras venir a bailar conmigo? yo sé que es tu mayor sueño, ven y sin más tomo su mano y ambos fueron flotando hasta convertirse en lo que son ahorra, unas estrellas meciéndose en el cielo mientras brillan

-wow que cuento más largo -dijo riendo, yo la mire mal y ella se acercó a besarme- me encanto –volvió a darme un beso un poco más largo y me miro a los ojos- lamento no ser una estrella ni ser hermosa -susurro-  ni rubia de ojos azules, pero te puedo jurar que también hubiera bajado del cielo por ti

- y yo lamento arruinarte tu pena, pero tu siempre fuiste mi hermosa estrella, no necesito ninguna rubia de ojos de color –le apreté su mejilla- te tengo a ti

-Me lo puedo teñir

-Ni de loco te dejo hacer eso, así eres perfecta con tus bellísimos ojos chocolates y tu hermoso pelo marrón -la tome de su cara con delicadeza- Te amo -le dije besandola lentamente

-Yo también te amo -sonrió y me separe de sus labios sonriendo

-Creí que te había dicho que las prefería morenas -reímos los dos mientras me subía arriba para profundizar el beso

Fin del Flashback

Solo Amigos - Capitulo 7

Capitulo 7 – El se fue

-¿A dónde crees que vas?  -voltee y Edward estaba parado aun lado mio con sus labios rojos y sus mejillas manchadas de labial rojo y su cuello con las mismas masque que le deje yo en esta mañana,me dio asco de tan solo verlo. Yo lo había dejado así, pero ahorra que lo hace otra, me hizo sentir pura furia ¡Puta madre! ¿Pero que chingados me pasa?

-Voy a casa –conteste y trate de zafarme pero él me agarro más fuerte

-¿Por qué si estamos muy a gusto?

-No, tú lo estás, ya llego tu novia, bueno me iré –me soltó- diviértete con ella –pude ver una ligera sonrisa, pero no hice caso y seguí caminando

-Bella, hay que compartir –me siguió- no seas celosa –me voltee y le iba a dar una cachetada pero me detuvo

-Eres un idiota –le grite- me voy a casa y por favor límpiate la maldita cara  -camine más rápido- ¡celosa, ja si claro! –bufe y pare el primer taxi que vi

-Buenas noches señorita –dijo el taxista- ¿A dónde la llevo?

-No gracias, ya tiene quien la lleve –Edward me tomo del brazo y me jalo a su volvo

-¿qué haces imbécil?

-te llevo a casa –mire el show que estábamos haciendo asi que me subí sin renegar, era inútil. Cerro la puerta y subió, con su mano se frotaba la frente para tratar de calmarse, eso hace cuando esta molesto y a pesar que se supone que yo debería ser la que estaba enojada, no dije nada.

Llegamos a casa y me baje del auto, trate de calmarme, era estúpido que me enojara porque besaba a su chica, Dios no faltaba mucho para que ellos anduvieran

-Nos vemos –me despedí y baje. Escuche cuando abrió la puerta y la cerro, suspire y entre dejándola abierta, el entro tras de mi como pensé y se cruzó de brazos

-¿Ahorra dime que te sucede? –Me miro fríamente, pero al estudiar mi rostro, suspiro y dejo caer sus brazos- Bueno, supongo que tengo que decir que lo siento –susurro- así que lo siento, no debí de besarla frente a ti eso fue descortés

-Por Dios Edward hace mucho tiempo que dejaste de ser Cortes conmigo –hice una mueca- aparte –dije subiendo las escaleras sabiendo que el caminaba tras de mi- puedes besar a tu novia cuando quieras –entre a mi cuarto y me recosté en mi cama

-Aún no se lo pido –chasqueo y se sentó en el sillón de mi recamara, levante mi cara y ambos nos miramos, a los ojos sin decir nada

-¿Cuándo se lo dirás? –pregunte en un susurro, él se levantó y aun sin dejarnos de vernos, se acostó a un lado mío

-No lo sé –contesto en un susurro y un brillo en sus ojos.  Parecía, como si estuviéramos contando nuestro más grande secreto

Aquí es cuando recordaba que era mi mejor amigo, no solo era el sexo, pero una punzada de dolor me llegó, al recordar a Jacob y saber la gran diferencia de ambos, ahorra Jacob empezaba a remplazar a Edward, mientras este se alejaba para dejar de ser mi amigo y ser novio de Tanya. Era extraño ver a Edward tan feliz, no es que no lo fuera ya, pero es que, te daba envida, no miento, ver como los demás avanzan, encuentras a su amor verdadero y son felices, creo que eso es lo que me pasaba, ver a Edward así de feliz, sonriente y con un brillo maravilloso en sus hermosos ojos verdes, daba celos, celos de que él estaba creciendo y haciendo su vida y yo no. Edward se está enamorando y eso era digno de ver, lo que me atemorizaba era si ella lo correspondía de esa misma forma, ella también lo quería, yo jamás dejaría que una chica lastimara a Edward, él era mi amigo y tenía que cuidarlo, no importa lo que crea, ella no era digna de él, nadie lo era, yo sé que muy adentro de él, es amoroso, muy pocas personas ven ese lado, muy apenas yo lo hago.

-¿Bella, puedo preguntarte algo? –pregunto aun susurrando, asentí, él se acercó más a mí y se sonrojo- ¿cómo sabes cuándo te gusta alguien? –otra punzada más a mi corazón

-Realmente, no sé Edward –mire el techo- nunca me ha pasado o no por lo menos así de fuerte –lo mire a los ojos y sus brillo en los ojos había desaparecido, tratando de sonreír, pero con la tristeza reflejada en el

-No importa –se encogió de hombros.

-Bueno, tal vez se algo –rápidamente me vino a la mente Jacob- a mí me gusta alguien y te diré que es extraño –el me miro ceñudo, me acomode boca arriba y lo mire - no te lo había dicho, porque me daba vergüenza, lo siento –mire de nuevo el techo con mis mejillas sonrojada

-¿Quién es? –Pregunto aun ceñudo y con cabeza ahorra recargada en su mano, mientras seguía acostado de lado, parecíamos unos criollos hablando de quien nos gustaba, reí ante mi pensamiento- ¿Quién es? –insistió Edward, lo mire y sonreí volviendo a voltear al techo, mientras jugaba con un cojín en mis manos

-No es que lo ame o algo así –ignore su pregunta- pero te admito que me gusta mucho –me sonroje de nuevo- verlo sonreír y feliz, me hace feliz –sonreí mas al recordar lo de ayer-cada vez que lo veo, no me parece suficiente para estar con él, quiero verlo cada minuto del día conmigo, realmente no importa lo que hagamos, mientras este conmigo –me sonroje aun mas ante mis gran confesión y por fin mire a Edward, el me miraba como si estudiara mi rostro, estaba ceñudo y podía ver que en su cara había pura confusión.- ¿Que pasa Ed? –pregunte preocupada

-Hablas como si estuvieras enamorada –siguió viéndome a los ojos, como si tratara de descifrar un acertijo- estas enamorada –murmuro, no era una pregunta, era una afirmación para contestarse a si mismo

-No, no es así –conteste- creo que cuando me enamore lo sabré, no es algo así de fuerte, solo es un amor pasajero –recordé sus palabras y le sonreí, pero Edward, seguía con su cara ceñuda y sin hacer nada más que mirarme a los ojos

-¿Quién es? –Pregunto de nuevo, me sonroje de nuevo y mire hacia la ventana- no me quieres decir –de nuevo no era una pregunta- ¿Por qué? –su pregunta era tan simple, pero su voz me partió el corazón, estaba llena de dolor, lo mire y me acosté de lado al igual que el

-Tengo miedo –susurre jugando con su melena despeinándola aun mas

-¿Por qué?  -coloco su mano en mi mejilla, me sonroje

-Es que siento que se arruinara todo –su cara se relajó totalmente y un brillo apareció en sus ojos- es que, no quiero que…

-Si  –insistió

-No quiero que le hagas daño –conteste sonrojándome más, su sonrisa desapareció por completo- no me hizo nada malo, solo no quiero que le hagas na..

-¿Dime quien ese? –casi gruño interrumpiéndome

-Te vas a enojar, lo se y Jake no tiene la culpa…

-¡Ese maldito perro! –dijo exaltado y se sentó rápidamente en la cama- ¡es un animal Bella!

-¡Lo vez! Ya sabía que te ibas a enojar –me levante de la cama y me pare frente a él con mis manos cruzadas en mi pecho

-¿¡Estás loca!? –grito tratando de levantarse, pero yo lo empuje con mi mano

-¡Por Dios, Edward, no es para tanto!  -él no me miraba y empezaba a saltarle su vena - Edward, no es un mal tipo, es alguien muy bueno que me cuida y me respeta, por favor no te pongas de sobreprotector conmigo ahorra –Edward cerro los ojos y se sobo la frente con su pulgar, como siempre

-Es solo un maldito perro apestoso –gruño- no te quiero con el

-¡Tu no me puedes decir con quien estar o con quien no! –Le grite- ¡a mí me gusta Jacob y si lo quiero es mi problema no el tuyo!

-¡No, a mí me importas y me vale madres! –Se levantó y empezó a señalarme con su dedo- ¡Tú no lo veras de nuevo y punto! –gruño, yo rodé los ojos y puse mis manos en mi cadera

-¡Mira idiota, tú no eres mi padre, déjale eso a el! –gruñí- ¡yo no te digo con quien estar, si tú quieres a Tanya bien, lárgate con esa maldita zorra! –le grite y le pegue en su pecho con mi dedo- ¡a mí no me digas que estoy mal cuando tu nada más estas con ella para que te la chupe! –repase mis palabras pero no me réctate

-Yo la quiero –susurro me paralize ¿Que mierda fue ese ruido? ¡Oh si mi corazón!

-¡Bien, pues vete con ella! –podía asegurar que estaba roja de la furia- ¡Yo quiero a Jacob y no me importa que pienses de mí, si no me vuelves a hablar, ok, lárgate, Jake es más importante que tú, como para perderlo por tu culpa! –Edward no dijo nada se quedó callado como si estuviera en shock

-Más importante  -repitió en un susurro, hizo una mueca y empezaba a caminar a cada esquina de mi cuarto como si tuviera una pelea consigo mismo- bien, ok me iré –movió sus manos al aire teatralmente pero en su cara había puro dolor-  solo quiero saber algo… - se acercó a mi rápidamente y me estampo un beso ya estaba cayendo en sus redes hasta que recordé que estaba enojada

-¡Deja de hacer eso de una maldita vez! –Le grite empujándolo- y claro que es más importante, que no ves que en verdad me importa Jacob, tal vez sea mi novio y no creo que le guste que me acueste con un idiota -Edward no se movió ni hizo nada, solo se quedó ahí como si estuviera repitiendo las palabras en su mente, de pronto sus ojos verdes esmeralda se pusieron vidriosos y su cara se veía algo dolorida,  se alejó y bajo las escaleras Y ahí fue donde reaccione cada palabra dicha, Pero que estúpida fui, ¿Cómo le pude decir todo eso a Edward? - ¡Edward, espera!

-Está bien Bella -tomo su mochila- ya entendí, me iré de aquí -camino a la puerta mientras yo iba atrás de el- si eso es lo que quieres, no te preocupes, te dejare hacer tu vida

-No seas exagerado, sabes bien que tengo la razón y no tardas  mucho en estar con Tanya –el me miro un segundo y después su cara se volvió fría

-Por eso dije que si es lo que quieres –yo no entendí- yo también hare mi vida, con Tanya, tienes razón -auch, eso fue como un golpe bajo eso es lo que quería, si claro, eso es lo que quería, todo está bien Bella

-¿Estás enojado? -le pregunte, aun pensando su respuesta, el negó y se quedó parado, ahorra yo me acerque a él y lo tome del cuello- Edward, nunca dije que dejemos de ser amigos -me acerque a él y le di un beso en su mejilla- tu también necesitas ser feliz – dije con dolor, lo solté del cuello y lo abrase, el tardo pero me correspondió, ¿Por qué me dolía eso? Duramos mucho tiempo así, no sé por qué pero podía jurar que estaba llorando

-Me tengo que ir -me dio un beso en mi frente y salió, ni siquiera lo vi a la cara y yo como estúpida que soy solo me quede ahí parada hasta que arranco y desapareció por la carretera.

I Will Always Love You

Prefacio

Estaba en el hospital, en la camilla, el me miraba triste y preocupado.

No entendía como es que estábamos aquí.

-Perdóname  –susurro y yo asentí con mi cabeza-

–Tú no hiciste nada malo, yo te aleje de mí-

–No te vayas – suplico

-No lo hare –conteste yo- Aquí estoy, no me iré, lo prometo…

Que cómico era esto, como es que tiene que pasar algo malo para que la gente reaccione de lo que hizo, yo lo hice, lamentablemente fue cuando se me acababa el tiempo con él. Tanto lo aleje de mí y ahorra me arrepiento con toda mi vida y realmente no recuerdo el por qué. No sé qué paso, todo cambio de un día para otro.

-Ni importa lo que pase, siempre te amare -su voz era más débil

-Siempre